viernes, 19 de septiembre de 2014

doña margarita flores

doña margarita flores páez no tiene perrito que le ladre. así sin más se va desabrochando la bata al irse a dormir una noche más sola que la una, y es que todos los días siempre lo mismo. doña margarita ya no sabe ni lo que quiere, lleva tanto tiempo haciendo lo que quiere que ya no sabe ni qué ha estado haciendo y si lo quiere o qué pasa. la pobre margarita hace todos los días exactamente lo mismo, siempre dándose brío por darse algo. ya no cree en nada ni en nadie, si lo piensa un poco le asquea la idea de creerse algo, pero ella sabe que uno es más feliz creyendo y le pone ahínco a través de las náuseas, pero es que no hay manera ya. la última semana sus esfuerzos psíquicos se centraron bastante en la fe nihilista, pensando que quizá en ella podría encontrar alguna respuesta adaptada a su decadente estado mental, pero al final lo ha dejado todo en manos del devenir y el laissez-faire, no nota mejorías en lo suyo, pero por lo menos no tiene que hacer tantos esfuerzos estúpidos.