sábado, 19 de noviembre de 2011

invierno

debe de ser invierno. sí, invierno. estoy segura.
debe de ser invierno porque levantas la frente y sabe a escarcha y a pena. porque el patio está repleto de carámbanos nuevos. porque se escuchan los lobos aullar. y el tiempo.

debe de ser invierno porque está la calle desierta.
porque la sangre hiela mis sentidos. porque el aire viene a lomos de una hiena. y la tristeza.

debe de ser invierno porque hay naranjas cada mañana.
porque me pides que te quiera. porque lo único que quiero es quedarme aquí quieta. y la candela.

debe de ser invierno. sí, invierno. estoy segura
. porque las plantas se quedan.

sábado, 5 de noviembre de 2011

peros

un día me enfadé
me enfadé y quemé
los volcanes de mis manos
con plata, pero
el día que tú te fuiste

el-día-que-tú-te-fuiste

los volcanes en mis manos
volvieron a nacer.

sábado, 29 de octubre de 2011

tiempos verbales

intentado recomponerme cada segundo
sufriendo la indiferencia, el hastío,
soñando con un algo que no llega
sintiendo entre los huesos el sentido.

siento que no es esto lo que quiero
sueño que puedo volar en línea recta
sufro que tus gestos no me quieran
intento que la pena sea un nido.

sueñas que una luz intermitente
sientes que el calor te quema vivo
sufres que mi pena sea frío
intentas que te lleve la corriente.

sufriendo, amor
amor soñando
sintiendo amor,
intentando.


martes, 11 de octubre de 2011

tapa

destapa esta etapa

y

deja que salga

lo que la empapa

sábado, 1 de octubre de 2011

vulcano

patata tenía un tremendo picor en la palma de su mano izquierda, ni si quiera miró, solamente rascaba y rascaba como si le fuera la vida en ello. poco después empezó a notar cómo la piel se iba rasgando, ahora tenía la palma de la mano muy rugosa. al tacto notaba unos pequeños bultitos bajo lo áspero que se podía notar a simple caricia.


un día notó cómo la piel empezaba a amontonarse alrededor de los bultitos formando pequeños volcanes en la palma de su mano izuierda. pensó en lo peligroso que podría ser llevar volcanes en las manos, pensó en lo difícil de afrontar la situación en que éstos entraran en erupción ante un movimiento brusco, pensó en lo poderosa que era ahora que tenía volcanes en la palma de su mano.


empezó a cuidar afanosamente de sus nuevos accidentes geológicos: en verano los cubría con sus dedos formando un microclima húmedo y oscuro y cuando iba a la playa los mecía suavemente sobre la superficie salada con el fin de refrescar su núcleo; extendía sus volcanes bajo la lluvia de otoño; los pasaba con cuidado sobre la nieve de invierno; los cubría de flores durante la primavera.


desde que patata tiene volcanes en la palma de su mano su vida ha cambiado mucho.


domingo, 26 de junio de 2011

g.a.b.

- escribir poesía es muy fácil -decía patata- ¡es facilísimo! lo que pasa es que yo no puedo porque he leído demasiado a becquer.


- ¿a becquer? ¿y eso qué importa?


- pues importa poco, la verdad, poco. lo único que cada vez que me pongo a escribir una poesía, ésta se escribe sola. de repente leo frases como ésta: de asuntos falta enmudeció la lira, podrá no haber poetas pero siempre habrá poesía; retorcida entre los hierros de algunas palabras sin sentido.


- entiendo.


- en otras ocasiones, cuándo me encuentro un poco más romántica que de costumbre, empiezo a escribir y súbitamente estoy escribiendo cosas de la guisa de: me ha herido recatándose en las sombras, sellando con un beso su traición, las manos me echó al cuello y, por la espalda, partióme a sangre fría el corazón. esto lo escribo, incluso, aunque no me haya propuesto la poesía como estilo expresivo. es realmente desconcertante.


- entonces quizá deberías empezar a leer a otros poetas.


- no, es inútil, ya está todo hecho. una vez que empiezas con gustavo ya no puedes deshacerte de él. solamente me consuela el hecho de que: volverán las oscuras golondrinas de tu balcón sus nidos a colgar y otra vez con el ala a sus cristales jugando llamarán, pero aquellas que el vuelo refrenaban tu hermosura y mi dicha al contemplar, aquellas que aprendieron nuestros nombres, ésas no volverán.


una vez intenté leer a ángel gonzález, bueno, no lo intenté lo leí; lo que intenté fue que se me traspasaran los plagios de un lugar a otro. además es mucho mejor plagiar a ángel gonzález. después de leerlo me puse a escribir y entonces salió esto: no me admiró tu olvido, aunque de un día me admiró tu cariño mucho más, porque lo que hay en mí que vale algo, eso ni lo pudiste sospechar.


en este momento dejé de escribir y pensé que era probable que adolfo se hubiese molestado conmigo por intentar zafarme de su influencia.


desde entonces procuro no escribir mucha poesía.

sábado, 18 de junio de 2011

viento

y lo que pasa es que hoy, si me pongo a escribir, me quiebro por dentro.


y lo que pasa es que ya, si me pongo a callar, me duelo con tiento.


y lo que pasa es que sí, si me pongo a pensar, me sobra el aliento.


hoy ya sí. por dentro me tiento el aliento.

jueves, 24 de marzo de 2011

azul zafiro

patata iba sentada en el asiento de atrás de un coche destartalado cuando de repente pasaron por un punto de inflexión del tramo que iban a recorrer. ella sabe perfectamente que después de ese punto, marcado con un arco de piedra, sólo hay mar. mar y cielo. el camino a partir del arco es peligroso y angosto y, sin embargo, extremadamente bello. cegadoramente espléndido.


al traspasar el arco empedrado el mar a sus pies, ostentando orgulloso un inexistente color azul zafiro. brillante, oscuro, transparente. azul. azul. azul.


elevó la mirada al cielo y allí el espectáculo era casi divino; el cielo lucía un turquesa luminoso, terso, opaco. turquesa. turquesa. turquesa.


los ojos humanos no pueden soportar tal belleza -piensa patata- la mezcla de azules es inhumana.


cuando la naturaleza parece haber soltado las armas, cuando estamos seguros de que nada puede ser más dolorosamente perfecto, una brisa comienza a mesar nuestros cabellos. al virar hacia la izquierda se puede comprobar que ese tenue soplido de eolo nos ofrece de entre sus delgados dedos los frutos de la primavera. una bocanada de flores de cerezo irrumpe dentro del coche cubriéndolo todo de olores palpitantes y vivos. una nube blanca, rosa, suave. blanca. blanca. blanca.


ya ha llegado -piensa patata- azul. azul. azul.

domingo, 6 de marzo de 2011

sometimes

a veces patata sale de su casa. a veces cruza la cancela del portal. a veces el sol cegador de la mañana le empapa la cara. a veces cierra los ojos y mira hacia arriba. a veces se queda unos segundos contemplando la luz naranja que resulta de esta costumbre milenaria y transcultural. a veces sonríe orgullosa y solemne. a veces piensa fugazmente que ese es el instante más feliz de su vida. a veces siente un cosquilleo en el estómago. a veces vuelve a abrir los ojos con pereza. a veces planta el pié derecho en la calzada. a veces patata sale del portal de su casa.

jueves, 24 de febrero de 2011

calleja vieja

en un callejón húmedo. los labios desteñidos por el frío. tristemente agazapada en un rincón mojado. nada y nadie. los huesos tiritando al ritmo de la lluvia. el pelo goteando tempestades. risas macabras en ninguna parte. silencio atronador y lascivo. lanzando maldiciones por la boca. sellada. soñando despierta con tu mano tierna.
no te preocupes ya. el sol está asomando por detrás de la verja.

lunes, 14 de febrero de 2011

primavera emocional

una atmósfera asfixiante. nubes rojas. nubes verdes. cielo naranja.


un paisaje brumoso. árboles caídos. casas esqueléticas. perros famélicos.


una tierra seca. grietas negras. hierbas moradas. piedras grises.


un río espeso. peces muertos. ranas podridas. algas tristes.